martes, 3 de abril de 2018

Como en casa

Me sorprende a mi mismo la velocidad con la que me he acostumbrado a vivir aquí, parece mentira que solo lleve dos semanas. No es porque no me haya tenido que enfrentar a situaciones nuevas, al contrario, el hecho de estar "solo" y tener que lidiar con ellas a diario me ha ayudado a aprender valiosas lecciones. Una de las cosas más importantes que he aprendido es que cuando estoy haciendo algo no basta que esté mas o menos bien, ya que si surgen problemas por intentar hacer algo mas rápido de la cuenta luego seré yo quien tenga que arreglarlos haciendo que pierda aun mas tiempo que si hubiera hecho las cosas con paciencia y cuidado.


Aunque a principios de semana parecía que el invierno fuera a ser eterno estos últimos días han mejorado las temperaturas, bufandas y guantes pasan a ser un complemento frente a el equipo indispensable para la supervivencia que eran cuando aterricé por primera vez. Aun así los días fríos y lluviosos me han permitido dedicarle tiempo a la lectura hacía tiempo que no leía tanto.


No todo han sido lecciones vitales y reflexiones personales, esta semana he podido visitar nuevos sitios en Berlín como el Museo de la RDA, con muchísimos objetos en información de la vida cotidiana en esa época.
Tambien he estado en Görlitzer park, uno de los muchos parques que existen en el centro de berlin, es un parque bastante bonito, con lagos y un zoo para acariciar cabritas y ovejas. Habia todo tipo de personas, conocí a un grupo de dominicanos y rapidamente me hice amigo de ellos.


Respecto a el trabajo esta semana aunque con un día menos (si, los alemanes también hacen fiesta)  puedo decir que me he manchado las manos. Hemos estado instalando la infraestructura de red de la tienda que hay en el distrito de Spandau, afortunadamente recordé útiles consejos como sujetar el taladro con las dos manos y colocar un sobre con fiso bajo el agujero para que no caiga polvo al suelo (ingeniería española)

1 comentario:

  1. Muy bueno Ángel.
    Como se puede ver estás combinando perfectamente la parte técnica como la parte lúdica. Qué buena experiencia!
    Un saludo desde España (Viva la ingeniería española)
    PD: El español tiene tildes

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